Cuando nos preguntamos qué problemas emocionales están vinculados con el sobrepeso y la obesidad, sabemos que la respuesta da para mucho.
Partamos de la idea de que somos un todo indivisible. Nuestra mente y nuestro cuerpo son uno solo, que se interrelacionan constantemente con nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestros actos y todo el contexto que nos rodea.
Por eso, es entendible que ante un suceso emocional impactante, lo notemos en nuestro cuerpo. Y que ante algo que notemos en el cuerpo, modifiquemos nuestros actos casi de forma automática.
Pongamos un ejemplo. Has tenido un día horrible en el trabajo, tuviste un problema muy desagradable con un compañero y además, cuando ibas para casa, había atasco impresionante y has tardado 1 hora más en llegar. Para colmo, llegas y descubres una humedad, y como habías dormido muy poco, te sientes con la energía al mínimo, por lo que terminas gritándole a tu pareja.
En ese momento en el que te sientes tan al límite, decides ir a la cocina y abrir la nevera para tratar de gestionar todas esas emociones que no sabes digerir.
Comes en exceso, buscando de alguna forma consuelo para todo eso que sientes. Aunque en el fondo sabes que no es la solución, no sabes qué más puedes hacer y es tu único recurso.
Pues bien, este tipo de situaciones, que posiblemente te resulten familiares, son más comunes de lo que crees.
De hecho, una investigación reciente del ISCIII y AESAN recopiló información reportada en la encuesta ENE-COVID ha mostrado que más de la mitad de los adultos y un tercio de los niños tienen exceso de peso en España.
De esta cifra, que a estas alturas seguro que no te sorprende, muchas personas posiblemente tengan sobrepeso por una nula capacidad de gestión emocional.
Y sí, por supuesto que también influyen hábitos de ingesta, genética y otros factores de salud, pero sin duda las emociones tienen un gran peso en este sentido.
Hoy hablamos en el blog sobre el vínculo de las emociones con el sobrepeso y la obesidad, y sobre qué puedes hacer si las emociones te están influyendo en tu caso.
El sobrepeso y el desgaste emocional
La felicidad no depende de nuestro peso, y justo os compartía esta idea en el anterior artículo.
Sin embargo, es innegable que el sobrepeso conlleva un desgaste emocional que se pone de manifiesto de alguna u otra forma.
Justo os hablaba en el anterior párrafo de la influencia que pueden tener nuestras emociones en nuestra conducta alimentaria, y en este sentido, me gustaría hablaros de dos tipos de factores emocionales: los primarios y los secundarios.
Empecemos por los que son más visibles y evidentes, los secundarios.
Los problemas emocionales vinculados con el sobrepeso y la obesidad secundarios son aquellos que son un reflejo del impacto que el exceso de peso puede tener.
Por ejemplo, los que nos causan el estigma social que supone no tener un cuerpo normativo y que pueden hacerte llevar a creer que eres menos valioso o valiosa para cualquier otra cosa, como un mejor puesto de trabajo, determinados planes en tu vida personal o una relación de pareja saludable.
Por no hablar de los incontables intentos fallidos por bajar de peso que van debilitando tu confianza en el proceso y con ello, tu confianza en tus capacidades.
Todo esto formaría parte de los que podemos llamar problemas emocionales secundarios, y que nos influyen visiblemente en nuestro bienestar y nuestra conducta.
Pero en el fondo de todo esto, la parte que no se ve tan a simple vista, también pueden haber otros factores emocionales, que pueden considerarse como primarios.
Estos pueden ser los que actúan como desencadenantes del patrón de alimentación, y que se complementan con los secundarios, haciendo que entres en un bucle eterno.
Algunos de los problemas primarios emocionales comúnmente asociados con el sobrepeso y la obesidad son:
- Depresión: la insatisfacción con la apariencia física, la baja autoestima y el estigma social relacionado con el peso pueden contribuir a la depresión.
- Ansiedad: la ansiedad puede estar presente debido a las preocupaciones sobre la salud, la imagen corporal y las experiencias de discriminación relacionadas con el peso.
- Baja autoestima: la sociedad a menudo asocia la delgadez con la belleza y el éxito, lo que puede llevar a una baja autoestima en personas con sobrepeso u obesidad.
- Aislamiento social: el estigma asociado con el peso también puede llevar a la exclusión social y al aislamiento.
- Tristeza y desesperanza: las dificultades para perder peso, la presión social y las expectativas poco realistas pueden generar sentimientos de tristeza y desesperanza.
Al final, los factores primarios se ven reflejados en los secundarios, que a la vez siguen alimentando de alguna forma a los primarios y así en forma de bucle que puede funcionar como una bola de nieve.
Por suerte, hay una forma de salir de la inercia y ver un cambio, primero interior que luego se refleje en tu físico. Y es: trabajar psicológicamente antes de adelgazar.
Acudir al psicólogo, primer paso para adelgazar
Tanto si estás leyendo este artículo porque te preocupa tu salud emocional actual como si tienes simplemente curiosidad, es muy importante que sepas que a la hora de adelgazar, es importante conocer cuáles son los factores que influyen en tu manera de relacionarte con la comida.
En consulta, analizamos todo tu contexto, tu historia, tus vivencias familiares, tu niñez y tus experiencias vitales para saber el origen de tus comportamientos.
Además, no solo podemos ser conscientes de por qué haces lo que haces, si no que te ayudará a encontrar herramientas de gestión emocional con las que manejar las situaciones de desbordamiento sin recurrir a la comida.
Acudir al psicólogo es el primer paso para adelgazar cuando hay problemas emocionales están vinculados con el sobrepeso, ya que te permite tener el control sobre tu proceso, y con ello, que puedas confiar de nuevo en ti.
Será una etapa no solo de cambio físico, también de descubrimiento y cambio personal que se verá reflejado para siempre en tu vida.
Ya sabes que si necesitas apoyo, en nuestro centro puedes encontrarlo. Trabajamos contigo en Madrid y Online en todos los niveles (psicológico, endocrino y deportivo) para que puedas bajar de peso mientras te fortaleces mental y emocionalmente.


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